Ya estamos a mitad de febrero y todavía no sé que voy a hacer para crecer espiritualmente este año. Para muchos esta puede ser la situación en este momento. Para ayudar un poco a resolver esta incertidumbre permítanme proponerles algunas recomendaciones que a mí me sirven.
La primera, es conocernos y saber que nos gusta, que podemos hacer y que se nos facilita. Por ejemplo, si yo quiero crecer espiritualmente leyendo un libro pero reconozco que me aburre leer pues me será muy difícil. En cambio, si me es fácil escuchar, pues la solución puede ser conseguir un audiolibro. Conocer nuestras fortalezas y debilidades nos ayuda a planificar mejor como mejorar en la vida espiritual.
La segunda, es poner las cosas en concreto y por escrito. Es decir, si solamente buscamos en nuestra imaginación que nos gustaría hacer, en la mayoría de los casos termina siendo solo un sueño, una idea bonita o incluso una frustración por nunca haberlo logrado. Escribir una lista también nos ayuda a ser más específicos. Por ejemplo: quiero este año leer dos libros de santos, voy a ir a la Misa más seguido, voy a ayunar los martes y los viernes, voy a aprender la oración de San Francisco de Asís, etc.
La tercera, es elegir solo una o dos cosas que sean realistas dependiendo del tiempo y la disponibilidad de cada uno y tomar acción. Si decidí leer un libro, pues necesito comprarlo lo más pronto posible; si decidí ir a la Santa Misa más seguido, necesito ponerlo en mi calendario ¡Ya! ¡Ahora mismo!; si decidí ayunar dos días de la semana, necesito planificar dónde y qué comeré esos dos días; si decidí aprender una oración, necesito hacer varias copias y ponerlas en puntos estratégicos y visibles de mi quehacer diario.
Por último debemos recordar que las prácticas espirituales y el crecimiento en la Fe son instrumentos que nos acercan más a Dios y esa debe ser siempre nuestra meta. Si al final de leer un libro puedo decir que mi amor o mi entendimiento hacia Dios crecieron, sí que estoy progresando.
Bendiciones para todos los que lean este artículo.
El padre Miguel Sánchez es secretario del Obispo Michael Martin.