CHARLOTTE — Por tercer año consecutivo, la Iglesia Vietnamita San José en Charlotte, no celebrará su tradicional Festival Tet, en prevención del contagio de la nueva variante de COVID que ha registrado recientemente un nuevo pico de casos en el condado Mecklenburg.
Así lo dio a conocer el Padre Tri Truong, párroco de la mencionada iglesia ubicada en el suroeste de la ciudad reina, quien explicó que el festival Tet celebra la llegada del Año Nuevo Lunar en el calendario vietnamita, que este año cae precisamente el domingo 22 de enero.
Al año 2023, según el calendario lunar chino, le corresponde al año del conejo. En el calendario vietnamita es reemplazado por el gato, un animal al que se le atribuye la cualidad de listo, talentoso, ambicioso y exitoso.
La parroquia ha organizado la celebración del Año Nuevo en sus tres Misas dominicales regulares: 8 a.m., 10:30 a.m. y 12:30 p.m.
La iglesia es tradicionalmente decorada para la ocasión. Al finalizar la liturgia, se reparte a todos los fieles asistentes un sobre de buena suerte color rojo que contiene una cita bíblica y un billete de un dólar. Esta costumbre es una muestra de aprecio y deseo de que un nuevo año lleno de salud, prosperidad, felicidad y éxito bendiga el hogar de quien lo recibe.
El Padre Truong anunció que este año, en festejo especial, se celebrará una Misa de vigilia el sábado 21 a las 11 de la noche. “Al terminar la Misa, tendremos una cuenta regresiva para anunciar la llegada del Año Nuevo y luego nuestro grupo juvenil Hidden Dragon Lion Dance ejecutará la danza del león.
Para quienes no puedan llegar a la Misa especial y celebración, las actividades serán transmitidas “en vivo” por el canal YouTube de la parroquia: www.youtube.com/user/GiaoXuThanhGiuse4929
Además, para quienes deseen degustar de la comida vietnamita, el domingo 22, desde las 8:30 de la mañana hasta el mediodía, se ofrecerá a la venta los tradicionales y deliciosos platillos de esa fantástica culinaria.
La Iglesia Católica Vietnamita San José se encuentra ubicada en 4929 Sandy Porter Road en Charlotte.
“Todos son bienvenidos”, dijo el Padre Truong.
— César Hurtado