CHARLOTTE — Preocupados por los momentos difíciles que vive el país centroamericano, decenas de nicaragüenses residentes en Charlotte se congregan cada jueves a las 6 de la tarde en la Catedral San Patricio para orar por su país.
Carlos Medina, diácono nicaragüense que sirve en la catedral, dijo que durante la jornada de oración se reza el Santo Rosario, “luego la Cadena de Adoración y Reparación al Santísimo y concluímos con la plegaria de San Miguel Arcángel”, amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio, “rogando a Dios y sabiendo que no nos va a dar lo que le pedimos sino lo que necesitamos”, y sobretodo “fortaleza para aceptar lo que Él nos manda, lo que Él sabe que necesitamos”.
Debemos,dice, “amar lo que Él quiere y querer lo que Él ama”.
El Diácono Medina no abriga muchas esperanzas de ver restablecida la vida democrática en su país.
“Ellos pudieron triunfar por las armas, pero nadie los va a poder botar por las armas porque nadie le dará armas a la gente de oposición que está tratando de luchar en contra de ellos. Ni siquiera Estados Unidos”.
“Los líderes del país se han dedicado a llenarse los bolsillos sin darle oportunidad al sufrido pueblo. Si el país entero está marginado y explotado, ha sido por la obra de sus mismos líderes que se han apoderado de la riqueza”, dijo.
CRISIS POLÍTICA
Según informó el Servicio Católico de Noticias, recientemente el Arzobispo de Managua, Cardenal Leopoldo Brenes, señaló durante la homilía de la Misa celebrada el domingo 15 de agosto en la Catedral de Managua, que su país vive “momentos bastante difíciles” a pocos meses de las elecciones de noviembre, en medio de una ola de detenciones a líderes opositores y candidatos presidenciales, y el reciente allanamiento del diario opositor La Prensa, el más antiguo e influyente del país, al día siguiente de que el medio denunciara la retención de papel y suspendiera las ediciones impresas.
Los directivos del diario son investigados, según una nota de la policía, por “fraude aduanero y lavado de activos”.
La Comisión de Justicia y Paz de la Arquidiócesis de Managua señaló que la ciudadanía debe exigir el respeto del voto popular en las elecciones generales del 7 de noviembre, en las que el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, que se mantiene en el poder desde 2007, busca reelegirse por cuarta vez consecutiva.
“El proceso electoral que debería ser una fiesta cívica se vive con temor e incertidumbre porque no existen condiciones para unas elecciones democráticas”, observó la comisión.
Hasta la fecha tres partidos opositores han sido eliminados y 32 opositores detenidos, entre ellos ocho precandidatos a la presidencia y vicepresidencia acusados en su mayoría de “traición” a la patria.
Entre los detenidos se encuentran los precandidatos presidenciales Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro, Miguel Mora, Medardo Mairena y Noel Vidaurre.
En junio pasado, los obispos católicos del país ya habían planteado sus preocupaciones sobre Nicaragua y pidieron en una carta “evitar la institucionalización en nuestra patria de restricciones arbitrarias e ilegales de las libertades ciudadanas y la persecución de la oposición y los medios de comunicación”.
“Preferimos y queremos un sistema democrático para Nicaragua”, en el que haya una “división de poderes del estado” porque “es el principio del estado de derecho ... el principio en el que la legislación es soberana y no la arbitraria voluntad de los hombres”, dijeron los obispos.
“Es necesario construir una Nicaragua basada en la paz, la justicia y el respeto a los derechos humanos, rechazando todo lo contrario a estos principios y trabajando juntos, conscientes de los pilares de la paz, la justicia y el perdón”, expresaron.
CONSAGRACIÓN A MARÍA
Ante la crítica situación, el Cardenal Brenes renovó la consagración de Nicaragua al Inmaculado Corazón de María con una oración en la que pidió que la nación “sea capaz de encontrar caminos de tolerancia y de comunión, de fraternidad y de paz”.
“A ti, Purísima Señora, consagramos nuestra patria, Nicaragua, en estos momentos de incertidumbre. Toma a Nicaragua entre tus manos y acógenos en tu corazón.
Ayúdanos a saber dialogar entre nosotros, a luchar por la dignidad de todos los seres humanos, a no dejar de tener hambre y sed de justicia, a ser hombres y mujeres tolerantes y constructores de paz”, dijo.
La consagración se realizó dos días después de que Ortega declaró que “algunos curas son hijos del demonio”, debido a que fueron mediadores ante la represión del régimen contra las protestas del año 2018.
Participe
Todos los jueves, a las seis de la tarde, puede congregarse en la Catedral San Patricio, 1621 Dilworth Road East, Charlotte, N.C. 28203, para orar por Nicaragua. Para mayores informes llame al 704-334-2283 en horas de oficina.
— César Hurtado, Reportero