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Catholic News Herald

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102320 olgCHARLOTTE — Tras casi siete meses de ausencia de Misas presenciales regulares en la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe en Charlotte, éstas se reanudaron parcialmente el pasado 27 de septiembre, para luego volver a su programación normal desde el 4 de octubre.

Como se recuerda, debido a disposiciones estatales que limitaban el derecho a reunión a un grupo mínimo de personas, así como posteriormente las ordenanzas de permanecer en casa, además de las recomendaciones de las autoridades sanitarias locales, estatales y nacionales para evitar la propagación de la pandemia de COVID-19, el Obispo Peter Jugis dispuso la suspensión de la celebración de Misas presenciales en el territorio de la diócesis.

Pese a todo ello, la parroquia Guadalupe, en plena observancia de las disposiciones sanitarias, buscó desde el inicio de la pandemia formas alternativas para ofrecer la presencia de la Eucaristía entre sus fieles.

Es así que, mientras desarrollaban sus capacidades para iniciar la transmisión online de los servicios eucarísticos, realizaron procesiones del Santísimo Sacramento visitando las zonas más necesitadas de su parroquia. Posteriormente, y hasta antes del reinicio de las Misas presenciales, ofrecieron servicios de comunión a los fieles que se acercaban al templo en el interior de sus vehículos.

“Son seis las Misas que estamos ofreciendo cada domingo, seis de la mañana, ocho, diez, doce, dos y cinco de la tarde”, dijo el Padre Hugo Medellín, vicario parroquial, explicando que la capacidad del templo se ha limitado para respetar el distanciamiento social.

“No son muchas las sillas y podemos acoger 150 personas en el interior, 25 en el pasillo y hemos colocado bocinas afuera para quienes, de pie, puedan escuchar la celebración”, añadió.

Según observamos, las sillas se han agrupado por conjuntos de 5, 4, 3 y 2 sillas, además de asientos unitarios para las personas que visitan el templo sin compañía. Todos los grupos de sillas guardan una distancia mínima de 6 pies. La Misa que atendimos, de doce del mediodía, estaba a plena capacidad.

“Fue muy conmovedor para mí ver, en una Misa en la que me tocó salir a dar la comunión fuera del templo, a muchas familias que, guardando su distancia social y cubriendo su rostro con cubrebocas, esperaban bajo el sol recibir el sacramento”, dijo el Padre Medellín.

Según refirió el P. Hugo, el pasado mes de julio, después de un cierre total de más de tres meses, se abrieron las puertas del templo para que, observando estrictos límites de reunión, los fieles pudieran congregarse para la oración. Ya desde agosto iniciaron las Misas presenciales únicamente con una Misa durante los días de semana a las seis de la mañana.

“Sabíamos que si se abrían las Misas con anterioridad iba a ser muy peligroso. La comunidad se iba a volcar a la Iglesia e iba a generarse una situación muy riesgosa para ellos mismos.

Teníamos que actuar con responsabilidad”, dijo el vicario.

Además de las Misas presenciales, aún se transmiten Misas online en su página de facebook los martes a las 7:30; miércoles, jueves y viernes al mediodía; sábado a las 6 de la tarde y domingo a las 8 de la mañana.

Respecto a esta respuesta de ofrecer Misa enline, el sacerdote explicó que se dió “como reacción a una necesidad para la que no estábamos preparados”.

“Supimos responder bien, fue providencial que en esos mismo días contratamos a una persona para que nos ayude con los temas de la tecnología. No sabemos lo que va a pasar. Si la necesidad persiste, la audiencia nos va a dictar el siguiente movimiento. Pero, gracias a esto, nos hemos podido dar cuenta que estamos al servicio de toda la comunidad, no solo de la nuestra, sino que, de otras lejanas, en Estados Unidos, México y el mundo, que nos siguen en nuestras transmisiones. Con generosidad, nos sentimos honrados de brindar nuestro ministerio de comunicaciones a todo el mundo de habla hispana”.

La venta de sus viandas en la cafetería también se ha reanudado. “Los que preparan los alimentos siguen todas las reglas de seguridad. Se puede pasar y recoger, pero también consumir en el lugar pues las bancas se han separado siguiendo las normas de distanciamiento social”, aseguró el P. Medellín.

— César Hurtado, Reportero

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