CHARLOTTE — Con una fiesta en la que se entregaron diplomas de participación y se sirvieron pizzas y refrescos, culminó el programa de proyección a la comunidad que desarrolla anualmente el Departamento de Policía de Charlotte Mecklenburg (CMPD, por sus siglas en inglés) en la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe.
Decenas de jóvenes hispanos participaron de cinco días en los que, de la mano de los oficiales de policía, conocieron el trabajo de los agentes del orden y otras agencias de emergencia, visitaron diferentes instalaciones, pudieron ver de cerca las diferentes unidades móviles que utiliza CMPD en su patrullaje y, lo más importante, se integraron con los oficiales y reconocieron en ellos su gran calidad humana.
El Oficial CMPD Bill Haynes dijo que el programa que mantienen con la parroquia se estableció hace algunos años con el propósito que los jóvenes de la comunidad hispana pudieran entender mejor el trabajo de la policía y otras agencias de asistencia en emergencias. “Queríamos presentarles a las personas y agencias que trabajan por ellos en la comunidad”, añadió.
Durante una semana laboral completa, por ocho horas diarias, los jóvenes recibieron la visita de miembros de la Policía, el departamento de bomberos, MEDIC, visitaron la base aérea de la Guardia Nacional y conocieron de cerca un helicóptero policial que llegó hasta los terrenos de la parroquia.
Haynes dijo que la mayoría de veces el contacto de la comunidad con los oficiales se produce en ocasiones desafortunadas, por lo que se hace necesario que “se conozcan en otros términos más positivos, más felices”.
Andy Pérez, uno de los participantes, dijo que el tiempo que disfrutaron con el programa “tendrá un efecto muy positivo para todos”.
Por su parte Lezly Reyes, otra joven participante, dijo que gracias a la visita a un laboratorio policial se interesó muchísimo en la investigación de crímenes.
“Antes los veía como personas malas, sin corazón”, señaló, pero ahora incluso considera seguir una carrera policial en investigación de escenarios de crímenes.
El Padre Gregorio Gay, pastor de la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe, presente en la ceremonia y fiesta de cierre, dijo que la colaboración de los oficiales de CMPD es constante y generosa con la comunidad. “Ellos quieren que la comunidad no les tenga miedo”, anotó y anunció que, gracias a la buena experiencia que mantienen desde hace tres años, continuarán con este y otros programas. “Tenemos la garantía del Oficial Bill, quien ya está jubilándose, que él va a continuar siendo parte con su presencia de la comunidad. Para él no es un trabajo, es dar de sí mismo por una comunidad que él sabe que ha sufrido”.
— César Hurtado, Reportero hispano
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