CHARLOTTE — Para conocer la psicología del adolescente y aplicar el conocimiento a sus ministerios y vida personal, cerca de un centenar de personas asistieron a un taller sobre este tema que fue ofrecido en el Centro Pastoral de la Diócesis de Charlotte el pasado sábado cinco de mayo.
El taller, de nivel básico, fue dictado por el Dr. Juan José Rodríguez, director de la Pastoral Juvenil del Instituto Pastoral del Sureste, con sede en Miami, quien fue invitado por el Ministerio Hispano del Vicariato de Charlotte.
Abarcando una extensa agenda que incluyó información estadística, conceptos de roles de género, sexo, etnicidad, implicaciones psicológicas y sociales de la pubertad, desarrollo de la adolescencia, relación con la familia, figuras de autoridad e independencia emocional, entre otros, la exposición desarrolló una conversación interesante que generó una gran participación de los asistentes.
Algunos padres de familia mostraron una gran inquietud respecto al tema del sexo e identificación de género en relación con la educación sexual que se brinda en las escuelas públicas.
También la discusión se centró en la influencia de las amistades y el virtual abandono de los hijos debido a las condiciones sociales y laborales de los padres. “Muchas veces, con la intención de ofrecer lo mejor a nuestros hijos, casi como los tenemos abandonados porque trabajamos intensamente”, dijo un participante. “Ahí viene la parte espiritual que debemos ofrecerles a nuestros hijos”, respondió una madre de familia. “Lo importante es que, gracias a estos talleres, podemos darnos cuenta y empezar a trabajar en respuestas apropiadas para asistir a nuestros adolescentes”, resaltó el expositor,
Después de definir las características de los adolescentes, Rodríguez estableció las características de los adultos, no solo biológicas y psicológicas sino también sociológicas, sociales y, “en los Estados Unidos, por ejemplo, hasta legales”.
Sobre el propósito de la conferencia, Rodríguez dijo que se trata de dar una visión general de lo que es la adolescencia “desde el punto de vista psicológico y el impacto que eso puede tener en la vida de los agentes pastorales y padres a la hora de guiarlos (a los jóvenes), en ese período de transición tan importante de sus vidas para que se conviertan en adultos responsables, serios y con una fe cristiana clara”.
Al comentar que un alto número de jóvenes presentan desequilibrios mentales durante esta fase de desarrollo, el expositor señaló que varios factores impactan esa realidad. “A veces los padres, no porque no quieran sino porque no tienen la posibilidad, desatienden a sus hijos. Y por otra parte, el ambiente social. Vivimos en un mundo donde, desgraciadamente, no son los valores los que nosotros quisiéramos que fueran los que verdaderamente la sociedad promueve”, por lo que hay que ser muy cuidadosos en señalar a los jóvenes los valores que, a la larga, van a influenciarlos y dirigirlos hacia algo mejor.
En relación a la crítica de los adolescentes hacia sus padres y personas mayores, Rodríguez restó importancia al hecho y señaló que, en esta etapa de crecimiento, los jóvenes se encuentran en una búsqueda “de autodefinirse” y para ello, en ocasiones, lo hacen por oposición a la figura de sus padres. “Afortunadamente ese es un período transicional y los padres deben estar preparados para cuando ese momento llegue. Pero si los padres hicieron un buen trabajo desde que eran niños, ese período se supera. Y, a la larga, los estudios señalan que generalmente los adolescentes, ya cuando se hacen jóvenes, tienen gustos diferentes a los de sus padres pero en valores se parecen mucho”.
Benito Contreras, de la pastoral juvenil de Asheville, comentó que el contenido de la charla lo ayudará mucho en su relación con los jóvenes y sus hijos. Resaltó que le resultó particularmente útil el reconocimiento de los cambios que ocurren en los niños en el paso hacia la juventud. “Yo se que ellos están hambrientos de amor. A veces nosotros como padres de familia por el exceso de trabajo los tenemos abandonados y no les damos el amor que ellos necesitan. Yo lo viví con uno de mis hijos”, dijo.
María Magaña, integrante del grupo juvenil de su parroquia, señaló que tras recibir esta charla siente que la ayuda muchísimo y le permite “ayudar a otros jóvenes también”, por lo que pidió una “actualización de la Iglesia” para encontrar nuevos medios que permitan que el mensaje de Dios “nos llegue a los jóvenes”.
Eduardo Bernal, coordinador del Ministerio Hispano del Vicariato de Charlotte, anunció que la segunda parte de este entrenamiento básico en psicología del adolescente se ofrecerá el 4 de agosto en la sede de la Diócesis de Charlotte. “Este segundo curso estará dirigido a todos aquellos que tomaron el primer taller y nos brindará mayor y más profunda información sobre cómo ayudar a nuestros jóvenes”, apuntó.
— César Hurtado, Reportero Hispano